En 2019, más de tres millones de personas visitaron el Museo del Prado, unas cifras que insisten en la necesidad de hacer una parada obligatoria en una de las pinacotecas más importantes del mundo.
El Museo Nacional del Prado abrió sus puertas al público hace 200 años, concretamente el 19 de noviembre de 1819. En un principio, la Colección Real aspiraba a acumular el máximo de obras posibles de ciertos artistas como por ejemplo Velázquez y Goya, los dos artistas mejor representados en el museo. Del primero, el Prado posee unos 50 cuadros, mientras que la colección de Goya asciende a 140 pinturas. Por ello, se dice que dicho museo es principalmente un museo de pintores más que de pinturas, donde cabe destacar la presencia mayoritaria de obras de otros artistas como El Bosco, Tiziano, El Greco y Rubens.
Sin embargo, con el paso de los años, la colección privada pasó de estar expuesta para deleite de unos pocos a convertirse en la principal institución cultural del país. Y es que en la actualidad, el inventario de bienes artísticos del Museo del Prado comprende unos 27.000 objetos entre los que se encuentran más de 7.800 pinturas. Pese a todo, el total expuesto que pueden contemplar los visitantes en la exposición permanente alcanza los 1.150 cuadros, gracias a la ampliación de espacio llevada a cabo en 2011. De esta forma, el Prado sigue cumpliendo con la misión de conservar, exponer y enriquecer el conjunto de colecciones y obras de arte estrechamente vinculadas a la historia de España, que constituyen una de las más elevadas manifestaciones de expresión artística de reconocido valor universal.
Si le parece poco, a la exposición permanente del museo hay que sumar las exposiciones temporales totalmente imprescindibles que la institución organiza temporada tras temporada. En la 2019-2020, con el fin de celebrar los 200 años de existencia de la institución, la exposición ‘Prado 200’ presentará en nueve unidades cronológicas la evolución histórica del museo, destacando temas relacionados con su arquitectura, su imagen pública y sus principales exposiciones y actividades. Con la muestra ‘Velázquez, Rembrandt, Vermeer. Miradas afines’, el Prado presenta un ambicioso proyecto dedicado a la pintura holandesa y española de finales del siglo XVI y del siglo XVII. La exposición, compuesta por 72 obras procedentes del Prado, el Rijksmuseum y 15 prestadores más como la National Gallery de Londres o el Metropolitan de Nueva York, propone una reflexión sobre las tradiciones pictóricas de España y los Países Bajos, destacando los numerosos rasgos que las unen.
‘Solo la voluntad me sobra. Dibujos de Goya’ mostrará, hasta febrero de 2020, más de un centenar de dibujos de Goya procedentes de las propias colecciones del Prado, y de colecciones públicas y privadas de todo el mundo, para ofrecer un recorrido cronológico por su obra que pondrá de manifiesto la pervivencia y actualidad de su pensamiento. De igual forma, la exposición ‘Historia de dos pintoras: Sofonisba Anguissola y Lavinia Fontana’ exhibirá la personalidad artística de dos de las mujeres más notables de la historia del arte occidental. Ambas alcanzaron reconocimiento y notoriedad entre sus contemporáneos, rompiendo con los estereotipos que la sociedad asignaba a las mujeres en relación con la práctica artística, y el arraigado escepticismo sobre las capacidades creativas y artísticas de la mujer.
Fotos | © Museo Nacional del Prado